Foto: Recuerdo en mi infancia cuando todas las noches había que poner una velita de mosquitos en la entrada de la puerta por la gran cantidad de estos detestables amiguitos que habían en la zona, al día siguiente sólo quedaba un espiral hecho de cenizas. Me encontré con esta en un súper y recordé esos días donde nadie dormía sin una velita de estas, aún puedo recordar su aroma y lo mucho que me divertía haciendo diseños con la ceniza que quedaba.