Uno de los elementos con que debe tratar el gobierno ahora más que nunca, es de al menos reducir el tráfico ilegal de ciudadanos nuestros a distintas partes del mundo. En Diario Libre hacen referencia de un grupo de mujeres, que están en Turquía sin ayuda alguna de las autoridades.
Diez mujeres en total, que anhelan de todas las formas regresar a su tierra natal, fueron dejadas en esa nación, que se encuentra a medio camino entre Europa y Asia. La representante de la Procuraduría General en asuntos migratorios, Eulogia Familia, anunció que la Cancillería ya está resolviendo su situación, pero resaltó el llamado a que las autoridades sean más vigilantes o mejoren los procesos migratorios tanto dentro y fuera del país.
Eso igualmente lo exhortamos en este metroblog. Las violaciones de los derechos humanos, y más a mujeres que se suscitan en esta peligrosa travesía, son incontables. Más que buscar cambiar políticas económicas y sociales, también hay que buscar concienciar a la nación de que esta práctica es ilegal.
Miles de ciudadanos dominicanos, en especial mujeres, hacen estos viajes vía «grupos de personas» hacia lugares como Argentina, Brasil y gran parte de Europa, en busca de mejoría económica. Pero en el camino pueden encontrarse de todo, hasta el punto que el acoso puede llegar a los límites de lo sexual.