Quedado por gasolina en el taxi

Después de un largo día en la calle —trabajo y estudios— tomé un taxi para dirigirme a mi casa y descansar un buen rato. De camino iba hablando con el chofer el cual tenía muchos temas diferentes, entre uno de estos estaba la falta de dinero. Me contaba como su sueldo no le alcanza para nada y que no podía ni dejarle a su esposa para la comida, me dijo que ni para gasolina le daba el dinero. Sus palabras eran tan usadas que sólo le asentí con la cabeza, cuando terminó de hablar el vehículo empezó a fallar y se detuvo, me miro y me dijo: «’Tamo queda’o por combustible» No me molesté ya que vi la cara de desesperación que tenía y me quedé tranquilo, rápidamente pidió otra unidad la cual me pasó a recoger. No sólo para él la situación está difícil, todos los días vemos como la situación económica empeora y día a día tenemos que hacer magia para subsistir con nuestros recursos.