Terminó la protesta, y el día de hoy, aunque martes, se siente como si fuera lunes. A continuación hago un listado con lo positivo y lo negativo de la huelga.
Pros:
- Se desarrollo en relativa calma. Solo se reportaron una victima fatal —aunque también valiosa— y unos cuantos heridos.
- El gobierno recibió un mensaje de rechazo sobre sus políticas, y aunque no responda a las demandas, tendrá que pensarlo.
Contras
- Todavía no habíamos terminado el día cuando los organizadores ya estaban hablando de la próxima.
- Aunque la convocó el Foro Social Alternativo los principales voceros de la huelga fueron los mismos actores de siempre: los sindicalistas del transporte. ¿Dónde está lo alternativo?
- Aunque sabemos que hay razones de sobra para protestar, el pueblo no fue enterado con precisión sobre las reivindicaciones exigidas. Está un poco fuerte eso de protestar casi obligados y sin saber la causa.
- A quienes afectan más directamente las huelgas no es a los grandes empresarios, que pueden darse el lujo de dejar hoy de producir y seguir operando mañana con normalidad, sino, a los micro y pequeños comerciantes que necesitan producir por día —o hasta por hora— para poder comer.
- Detener, aunque sea en parte, la economía del país, no le conviene a nadie, ni a los empleadores, ni a los empleados ni a los empresarios independientes. Regularmente la gente lo toma como un día más de vacaciones, pero hay industrias muy sensibles —turismo, por ejemplo—donde esto se siente y tarde o temprano repercute negativamente sobre todos.
Disculpen la negatividad, pero realmente me fue difícil encontrar los Pros, si alguien conoce otros —justificados— que me los pase.