Mientras los carros amontonados debajo del semáforo en rojo esperan la luz verde para seguir avanzando, un miembro de la Policía Nacional cruza como si del Presidente se tratara. Al ver esto los motoristas que esperaban el cambio de luz cruzaron aún estando en rojo, haciendo que los vehículos que tenían el paso se detuviera a ver el desorden que provocó un policía al momento de desobedecer una ley. En este país «Ley y orden» son dos palabras que no están muy combinadas, más bien cada una toma por su lado. Esperar que por medio de la ley haya orden en mi país es algo que veo muy difícil pero no imposible, aún tengo la esperanza de ver nuestra tierra convertida en el lugar que siempre hemos querido.