Conocido por todos como vendedores de la calle o marchantes los cuales muchas veces nos facilitan la vida con sus módicos precios y sus distintas ubicaciones —por aquí, por allí, a la vuelta de la esquina, un chin más pa’llá—. Son personas que se ganan la vida vendiendo frutas, víveres, legumbres y cualquier otra cosa que se le puede vender al pueblo con lo cual puedan conseguir su sustento. Este señor es de baní y es famoso en la zona por sus cómodos precios y su hospitalidad para los que le compran.