Añugarse no es fácil

Añugandose con Comida Estoy tranquilo en mi casa comiéndome unos plátanos con huevo, todo bien, disfruto de una de las comidas tradicionales más populares de nuestra cultura. Después de comerme todo el huevo, me quedo desolado con par de pedazos de plátano, con valentía decido abrocharme uno, y es en ese mismo instante que siento como se atrabanca en mi garganta, a una velocidad más lenta que una tortuga siento que se le dificulta bajar, trato de tragar y tragar a ver si lo empujo pero mi técnica no da resultados. Rápidamente y casi poniéndome azul voy a la nevera buscando algún liquido que me ayudara a suavizar mi ya atorada faringe, no vi nada familiar así que le eche mano a un liquido raro que había en una botella, era un batida de pepino, rábano y remolacha un brebaje de la dieta de mi madre, aunque sabia fatal, el liquido me quitó el súper añugue que estaba padeciendo.

Las masitas añugan cuídate de ellas

Todos nos hemos añugado alguna vez, esa incomoda sensación de asfixie y dificultad digestiva que nos dificulta el paso del alimento por nuestra garganta. Un mal momento que nos provoca creer que toda una lenta patana baja por nuestro interior. El añugue se da por varios motivos: Por comer sin antes lubricar con algún liquido, ya sea agua o jugo, también cuando no masticamos bien los alimentos o cuando se da la peor combinación: un alimento duro y seco de gran tamaño. Las masitas, añugan, los panes también, y los plátanos ni se digan, la mayoría de las veces comemos con tanta urgencia que quizás no recordamos que nuestros órganos son realmente sensibles y estrechos, como es el caso de nuestra faringe y esófago. Cuando nos añugamos muchos vemos casi una película por nuestros ojos, particularmente vi hasta cuando me gradué en el colegio, ya pueden ver si mi añugue con ese pedazo de plátano era grande.

Un vaso de agua es tu gran salvador

Dicen que pasa lo que no atora, precisamente eso es el añugue, un atoramiento (si existe ese término) o más bien un impidiendo de tragar normalmente provocado por algún alimento. Existen dos maneras de aguantar un añugue, la primera es tomarse rápidamente un vaso de agua y la segunda, se realiza en caso de no haber liquido: a tragar como un loco! Para que la saliva haga algo y los músculos puedan bajar lo que te está atorando. Esa situación de ahogo y sofoque es muy experimentada en los casos de añugue, hay gente que incluso hasta una lagrima les ha brotado de los ojos, sientes como si fuera empujando un carro en un túnel, con la diferencia de que eres tú solo el único que puedes empujar, sin manos! Añugarse es fuerte mucho más cuando estás junto a otras personas y tratas de explicarle lo que tienes, prácticamente se te va el habla y muchos comienzan a darte por la espalda, hasta que llega un héroe con un poco de agua fría. Ojala y la próxima vez que te estés ajutando un frito o un pedazo de plátano recuerdes que de no masticarlos bien pueden hacerte pasar un mal rato, para que no te añugues aquí va un ultimo tip: siempre deja un poco de la bebida que te estés tomando de ultimo así cualquier emergencia tendrás un chin que te pueda salvar en caso de atorarte.

5 comentarios

Los comentarios están cerrados.