Lo que declara Diario Libre en el día de hoy es más que cierto. A un mes de la catástrofe, gran parte de la población dominicana aún no se ha recuperado de los efectos de la tormenta, materiales y emocionales. Poblaciones del sur del la isla como San Cristóbal o Azua, siguen incomunicados. Otras zonas como el norte del país, ni hablar.
Los damnificados persisten. Los daños, peor. Una secuela que arrastra -según las cifras oficiales- 87 muertos, 46 desaparecidos, y millones de dólares perdidos en agricultura, viviendas y sistemas de comunicación terrestre. Y a pesar de las ayudas estatales o privadas, aún persisten refugiados en todo el país. Vaya fin de año que muchas familias van a tener, por el simple factor de no tener un plan de emergencia nacional a tiempo.
«Noel» no se ha ido
Joan Guerrero es publicista, diseñador gráfico y analista de nuevos medios. En su blog personal habla de tópicos referentes al nuevo periodismo, sociedad y cultura, publicidad, blogs e internet.