Cuando el poder se sube a la cabeza

AmetAyer iba en una guagua pública y entre sus imprudencias y sus locuras apareció un Amet que le dijo al chofer que no podía detenerse en lugar que estaba —al parecer al Amet tenía problemas de la visión porque no se fijó que delante de la guagua había una OMSA que no dejaba avanzar— este contando con su rango le dijo al chofer que se moviera no importaba como, el chofer se sentía incapaz de hacer algo pero en el momento justo la OMSA avanzó y pudimos adelantar. Al momento de cruzar la esquina había otro pequeño tapón donde nuestro querido Amet hizo nuevamente su entrada triunfal diciendo al chofer que él no es nadie para enfrentarlo —La razón de que el agente se pusiera así aún no la entiendo— entre vulgaridades y muchas discusiones esperamos unos 15 minutos mientras todos veíamos a nuestros jefes regañándonos por llegar tarde.

Sólo se necesita tener un puesto

Después que el agente hiciera al chofer desmontarse para comérselo a boches en la parte trasera de la guagua, de repente se montó y todo normal. El cobrador le preguntó «Te pusieron una multa» y el chofer con cara de satisfacción le dijo «Lo que pasa es que él no me dejó hablar, el no sabía que yo era militar» Eso me dio a entender que a los militares no se les pueden poner multar, al parecer las leyes de ellos son diferentes a las nuestras que interesante ¿no? Mientras nosotros tratamos de hacer las cosas como manda la ley, ellos simplemente las hacen como primero les salga… Nadie puede decir nada, son militares.