En la imagen: Panorama del Valle de La Vega, desde la Autopista Duarte.Hace unos días realice un viaje de trabajo, tipo relámpago, desde La Vega a Santo Domingo y viceversa, esta vez preferí mirar por la ventanilla en vez de dormir. El sol mañanero reveló ante mis ojos un pedazo de país lleno de maravillosos paisajes. Junto a mí, en el viaje de ida, se sentó una norteamericana que en su escaso español me expresó lo maravillada que estaba con la belleza de nuestro país. De regreso, cuando iba pa’ La Vega aproveché para tomar unas fotos. Quiero compartir con ustedes un poco de esa hermosura, pues con la prisa de nuestro diario vivir puede pasarnos desapercibida.
Debes tomar clases con un maestro de este arte, como Domingo Batista por ejemplo, que te enseñe a escoger mejor la luz y a encuadrar mejor, ya que en algunas hasta el horizonte está torcido.