El aumento sorpresivo de viajes ilegales en los últimos meses a islas como Puerto Rico y otras naciones por parte de dominicanos, es un termómetro de que la crisis se siente mucho antes de la anunciada quiebra de los bancos en los mercados. En ese sentido, más de 400 criollos durante este 2008 han sido víctimas en alta mar.
