Toyota Mangú: marcas aplatanadas

En este país el pobre no es gente, el peatón no es nadie y el que pide bolas no ta’ de na’. Gracias a la globalización notamos como cada día por nuestras calles y carreteras corren una inmensa variedad de vehículos, para toda clase de necesidades. En los últimos 10 años, nuestro país ha experimentado un aumento vertiginoso en su población vehicular. Fácilmente nos encontramos con que muchos de nuestros amigos andan montao… quizás en una chatarra del 89 pero están en 4 gomas, otros más arriesgados supieron aprovechar oportunidades de préstamos y se metieron en el lío de su vida… Es posible que no tengan para ir al cine, pero nos echan vainas con solo decirnos que tienen su «montura» parqueada en la calle.

Saturación vehicular

Si un político fuera el autor de este articulo quizás escribiría que esta importante saturación vehicular responde a una visión de gobierno globalizado y con visión de futuro comprometido en montar a todo el dominicano, al igual de dotarles facilidades para adquirir lavadoras neveras y estufas… casi parezco a un discurso 27febreriano, pero lo cierto es que esta invasión pacífica de franceses (Peugeot, Renault Citroen) Japoneses (Honda Toyota Nissan), y los siempre amenos americanos (Ford, Chevrolet Hummers) quizás es gracias a que muchos caminantes se jartaron de coger bola y ahorraron, otros se metieron a político y se engancharon, y algunos más ambiciosos decidieron ir más lejos: trajeron sus Ferraris, Lamborghinis o Bentleys con dinero limpio, gueleroso y acabadito de planchar. Otro de los grandes motivos para que quizás tu andes montao o pienses en andar en uno muy pronto son los muy vivos negociantes de automóviles, que al igual que nuestros peloteros con cedula falsa, se las supieron arreglar para que algunos carritos entraran con una edad distinta a la real… por ejemplo: yo ando en un carro dizque del 2000 pero en realidad es del 98, igual que nuestros peloteros.

Chulerías para tu carro

Sea cual sea la razón por la que ya están aquí creando más tapones y produciendo más dióxido de carbono la realidad es que nuestro país es un país con más carros que plátanos y si hablamos de motores, no terminamos de contabilizarlos en lo que queda de año. Ya tenemos toda una cultura vehicular que nos propone personalizar nuestros caprichos rodantes, llevándolos a los auto adornos más elegantes o a los Car Wash más lujosos, además la presión social de tener el mejor equipo de música instalado, las mejores alfombras y los aros que mas vuelta hagan, la idea es, mientras más bulto o más chulerías tenga tu carro, mejor. De alguna forma hemos dominicanizado nuestros autos, agregándole elementos nuestros como stickers de equipos de pelota, frases celebres (voladoras), carrocería hecha a la medida, vidrios moca, y mucho, mucho más.

Marcas aplatanadas

Que sucedería si las marcas que ya están con nosotros produjeran autos especialmente para el consumidor criollo. Imaginemos que en vez de producir todos esos modelos con sus nombres exóticos e impronunciables, los ejecutivos decidieran bautizar dominicanamente sus insignias motrices con nombres más populares. Por ejemplo: una juntadera se hace montado en un Coro Ya!, Toyota Coro Ya! Móntate en tu a fiesta! O quizás en el nuevo Honda Chilling, que trae hasta una mesa de dominó en el baúl, asegurando ser el verdadero motor de las gozaderas… Honda también lideraría el mercado de los deportivos pequeños con su atractivo modelo Civic Jachba, o mejor conocida como Jabá, la cual incluiría una linda pizzarrita. La competencia en los carros pequeños la librarían el nuevo Suzuki Chin, enano por fuera pero enorme por dentro, ideal para mujeres, su contrincante, el Nissan Maich, un modelo ensamblado en el Cibao, sería el único en tenei la silla de leather de chivo y una gaveta especial para guardar el dinero de mojai la mano a los policías.

Pero nada mejor que los carros grandes, escuché que el nuevo Honda Accordeón, trae dos macuto de aire (bolsas) y tres portavasos! El Volkswagen Bonche se ve muy chulo, viene en tres colores, mamey, colorao y cotorra pero la marca alemana también anuncia que este año lanzaran su modelo más esperado, un auto capaz de sorprender a todos los dominicanos rodantes, el nuevo Volkswagen tePassate.

Si trabajas en una finca, quizás necesites la nueva Ford Conuco, para que explores tus sembradíos de pipiotas. A mí me gusta más la Rancho Rover, una Yipeta que sabe andar entre lomas, ríos y charcos, aunque la Jeep Grand Cacique no se queda atrás es la única que no se enchiva y tiene una potencia de 200 burros de carga. Pero si lo que quieres es echar vainas encarámate en la Mitsubishi Coordillera, mejor conocida como Caraegato o Caraepolitico. Otra lujosa es La Hummer Mayimba, favorita de muchos Dominican Yorks y expertos del bate. Las mujeres que quieran andar cómodas pueden optar en la Hyundai Santo Cerro o la Hyundai Barahona, únicas con espejos más grandes y compartimiento para cosméticos, invitando a estar siempre bella en los semáforos. Para finalizar nuestro recorrido criollo todo terrenal nos montamos en la más lujosa de todas la yipetas, la que mas representa al ser dominicano, esa que es firme estandarte de la autenticidad y conservación de nuestra cultura, la nueva Cadillac Guacanagarix, la única que se vende al mejor postor sin importar la procedencia de este.

Vivir en un tapón

Sea cual sea la marca o el modelo, cada día hay más carros en la calle, sabrá Dios si existe un control que limite su cantidad, aunque por ahora el único control existente que evita una total saturación vehicular sea el no tener el dinero para sacarlo del dealer. Somos una isla, somos pequeños, solo será cuestión de tiempo para vivir permanentemente en un tapón, teniendo un día de 24 horas pico y mucho mas. Todo lo antes mencionado junto a la falta de parqueos, la necesidad de nuevos elevados y túneles por lo menos justifican una impresionante expansión vehicular con la bondad de saber que en RD están dadas más oportunidades para ser un expeatón, celebremos eso y manejemos mejor!

Alf MicStar (Colaborador Duarte101)
Es un comunicador, presentador de TV, locutor de radio, voiceover, incidental y productor de programas y contenidos para medios. Actualmente es el productor de los programas radiales Cambio y Fuera (104.5fm) y Al Aire Libre (Power 103.7fm).
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