Río NizaoEn la imágen: Río Nizao al desnudo. ©Semanario Clave.

El Río Nizao, desnudo y sin agua, víctima del «maltrato» que las granceras que se posan a su alrededor, pone al descubierto cómo se encuentra nuestra nación gracias al desorden institucional, la corrupción y cómo el manejo indiscriminado de recursos naturales traen como consecuencia que miles de ciudadanos se queden sin agua, el recurso más necesitado ahora, en muchas casas dominicanas.