Ojo con las enfermedades epidemiológicas. Conocerlas y saberlas tratar es uno de los vitales pasos que debemos dar para evitar males peores.
Un comentario
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Ojo con las enfermedades epidemiológicas. Conocerlas y saberlas tratar es uno de los vitales pasos que debemos dar para evitar males peores.
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Debería existir por norma expedir una «factura de buena salud» que garantice que un encuentro amoroso no se convierta en dolor de cabeza para el interesado.
La higiene personal no la ejercita todo el que luce un buen traje o un vestido con buen corte. Conozco cavernicolas que no se afeitan los sobacos ni las piernas para evitar la irritación, no utilizan jabón desinfectante pero adquieren perfumes que huelen a insecticidas, no se cepillan 3x/dia, la cabeza le hiede a sudor, caspa y el pelo no luce lustroso porque se bañan interdiario; para colmo, los hombros, y los cuellos muestran sudor de varias puestas! Son una contaminación ambulante!