Estuve probando ayer el servicio de Netflix para República Dominicana (Latinoamérica), una plataforma de video en streaming totalmente legal: pagas una suscripción mensual de US$7.99 (RD$300) y puedes ver de forma ilimitada y sin anuncios totas las películas y series de televisión que tienen disponibles en su catálogo. Es un servicio muy conocido en USA, pero no estaba disponible hasta ahora para Latinoamérica, por lo menos no de forma abierta. (Algunos usuarios avanzados lo usaban desde hace tiempo con VPN.) La orientación de Netflix no es una alternativa al telecable, pues no dispone de «canales de televisión» o programación de actualidad, sino más bien una versión mejorada de los clubes de video de toda la vida —en sus inicios Netflix era un video club que funcionaba por correo físico—, ahora de forma virtual desde Internet. Para que el público conozca y pruebe el servicio está disponible ahora mismo de forma gratuita durante un mes, previa inscripción de una tarjeta de crédito. Si no llena sus expectativas, el usuario puede cancelar antes de que termine el mes y no se le hace ningún cargo.
Suscripción
Tardé más buscando mi tarjeta de crédito en la cartera que en el registro mismo.
El primer paso para probar el servicio fue suscribirme. Sumamente fácil, tardé más buscando mi tarjeta de crédito en la cartera que en el registro mismo. Se nota que han pulido bien este importante paso inicial, pues no tiene ninguna pregunta irrelevante, solamente datos básicos: usuario, contraseña, datos de la tarjeta y listo. Luego una encuesta y ya estás dentro. Recuerden que en la letra chiquita dice claramente que desde que estás dentro ya eres cliente, que se te realizará el cargo a fin de mes a menos que canceles intencionalmente el servicio. Esta parte del registro parece irrelevante, pero por tratarse de un servicio totalmente online y la mayor barrera de entrada para el público en general, me pareció muy impresionante. En lo personal dejo de recomendar algunos servicios vía internet porque el proceso que tiene que agotar el usuario común para llegar a usarlo (pagar, descargar software, configurar cosas) es tan tedioso termina por abandonar.
Cantidad, Variedad y Actualidad
Cantidad y variedad, pero muy poco contenido nuevo. (Seguiremos yendo al cine.)
Después de estar dentro lo siguiente fue comprobar la cantidad, la variedad y actualidad de su catálogo. En los dos primeros (cantidad y variedad) le doy un 100, en lo segundo (actualidad) no llenó mis expectativas. Están los clásicos y películas relativamente nuevas, pero definitivamente seguiremos yendo al cine. Con las series me pasó lo mismo: están las más antiguas, pero nada de últimas temporadas. Un consuelo al respecto es volver al concepto que expliqué al inicio, Netflix no es telecable ni cine, es videoclub. De todos modos, es posible encontrar buen contenido por la cantidad y la variedad del catálogo y siempre está la opción de volver a ver esa película o serie que nos gustó mucho.
Calidad del servicio
En cuando a la calidad del video, no pude ver nada en HD. A pesar de haberlo configurado.
Este era el aspecto que más me interesaba probar. Cuando hablo de calidad me refiero al proceso completo: no me refiero solamente a la calidad del video o a la velocidad de descarga de la película misma, sino también al tiempo que me toma encontrar algo para ver y disfrutar en mi casa junto a mi esposa, la calidad del video y la calidad de la transferencia; todo junto. En cuando a la calidad del video, no pude ver nada en HD, a pesar de que en la configuración seleccioné esa opción. Alguien me comentó por Twitter que depende de la conexión que tenga cada usuario, algo entendible desde la perspectiva de la satisfacción: es mejor limitar la calidad del video para asegurar la calidad del proceso completo que tener buena calidad y veinte pausas en medio. La calidad del video la encontré pobre, pero desde que me metí en la historia de la película olvidé el HD. De todos modos, en determinadas series y películas con contenido muy visual, el HD hará falta. Al mismo tiempo digo que con la conexión de 1MB (Tricom) no tuve ninguna pausa.
Dejé para último lo que comparto a continuación por ser lo que encontré más relevante. Para el entretenimiento familiar considero que Netflix es una gran opción, pues logra hacer transparente cosas que los usuarios avanzados hacemos desde hace mucho (buscar una película, descargarla, sincronizar subtítulos, conseguir codecs) pero que al mismo tiempo han mantenido al usuario común anhelando el video club. La complejidad técnica que está detrás de un servicio así es muy amplia, pero no se nota. Está en la misma línea de Amazon o ITunes, servicios en línea que hacen fácil (transparente) procesos muy complicados y terminan atrayendo al usuario común. Siempre habrá gente que preferirá el Torrent o Cuevana, pero tomando en cuenta que por menos de US$7.99 (RD$300) tienes un gran catálogo de contenido a tu disposición en tiempo real, de forma legal y amigable, creo que vale la pena. Eso, y que con una sola cuenta puedes consumir contenidos desde diferentes lugares vía internet. Aún sigo probando el servicio —quizás mañana cambie mi percepción—, pero con lo que he visto hasta ahora lo recomiendo.