Los pendientes

En la imagen: Durante esta semana, miles de jóvenes estarán realizando las Pruebas Nacionales. ©Sacandomelao

Este año 100 mil 162 estudiantes del último año de bachillerato, de un total de 145 mil 988 inscritos, asisten a la primera convocatoria de las Pruebas Nacionales. Es probable que un parte de ellos (y no es mi deseo) pase a engrosar la lista de 55 mil 508 alumnos pendientes por aprobar uno o varias de las evaluaciones de estas pruebas desde el año 1999.

Los bachilleres pendientes son un fardo del sistema educativo. Muchos no saben que tienen derecho a asistir a la actual convocatoria a tomar las evaluaciones que no pudieron aprobar en su momento. A esto se agrega que el material de las pruebas de hace una década es totalmente diferente al de la actualidad. Por lo que estos estudiantes, en caso de querer completar el proceso para recibirse de bachilleres, tienen que necesariamente actualizar sus conocimientos.

El secretario de Educación, Melanio Paredes, dijo en una rueda de prensa este lunes –un día antes de iniciar las Pruebas Nacionales, que ese organismo les preocupa este grupo de estudiantes y que está gestionando con instituciones la aplicación de cursos para que estos puedan readecuar sus conocimientos y tomar las pruebas.

Me parece que a la iniciativa de Paredes para lograr disminuir a este grupo de estudiantes pendientes llego bastante tarde: un día antes de empezar las pruebas. Visto así parece que el interés por estos 55 mil 508 casi bachilleres es un discurso más que de tener alguna intención de aplicarse sería para el próximo año.

Aunque este año participan observadores en las pruebas (como en las elecciones, caramba!) el costo de estas pruebas, este año según la autoridades de unos 62 millones incluyendo las pruebas de los estudiantes de Octavo curso, y la facilidad con que pueden ser corrompidas, además de ver la gran cantidad de estudiantes que tiene pendiente su aprobación hace necesaria la evaluación de los niveles de eficiencia de esta pruebas. Como dato, les dejo la cantidad de estudiantes pendientes por materias. La mayoría no han aprobado las matemáticas. Sigue siendo la materia patito feo de nuestro sistema.