De niño participé en tantas excursiones al Lago Enriquillo (el mayor de República Dominicana y de las antillas, parte del Parque Nacional Lago Enriquillo e Isla Cabritos y de la Reserva de Biosfera de Jaragua-Bahoruco-Enriquillo) que perdí la cuenta. Ese destino es un clásico dentro del escaso ecoturismo que se hacemos los dominicanos tomando en cuanta la riqueza natural de nuestra tierra. Mirando este video que encontré en YouTube recordé todo aquello y me dio mucha nostalgia. Denle a play y disfruten de este tesoro natural dominicano, aunque sea desde lejos.
Video: Lago Enriquillo.
El trayecto más común para llegar al Lago Enriquillo incluye subir a ver la Cueva de Las Caritas (arte rupestre de origen prehispánico), intentar ver los cocodrilos (cosa que no era siempre posible) y un chapuzón en La Azufrada, una piscina cuyas aguas —tal y como su nombre lo indica— tienen un alto contenido de azufre. Para entrar en ella hay que parar la respiración, pero luego uno se acostumbra y hasta lo disfruta. (Es recomendable no pensar en los cocodrilos en ese preciso momento.)
El Lago Enriquillo, como dice el artículo, es una maravilla que no habría que dejar de conocer cuando se viaja a República Dominicana. Además, precisamente en ese país en donde lo único que uno espera encontrar son playas paradisíacas (que las hay, ¡y muchas!)no hay que perdérselo. Es precioso y diferente.