Ladrones diurnos [Relato]

Eran como las 11 AM. Los ladrones entraron rompiendo el candado de la puerta principal, uno tenía una sisalla, el otro una pata de cabra, las mostraban a la luz del día como si de una pala y un pico se tratara. Entraron a pesar de que había gente en la casa, rebuscaron en las gavetas y hasta intentaron romper la puerta de la habitación en la que se refugió la dueña, que con el corazón en la boca logró armar un griterío con el que logró espantarlos. Al fin salieron, se llevaron dinero y prendas, su cizalla y su pata de cabra. Llegó la policía, vinieron los vecinos y los familiares, se cambiaron los candados por otros más grandes. Aún no habían dado las doce. Ya los ladrones no se trasnochan ni se esconden, trabajan en horario regular, de 8 a 5. Pronto tendrán seguro médico, de vida, plan de retiro y —ojalá— vacaciones.

14 comentarios

  1. Bueno, eso si es verdad. En mi casa a las 9:00 am justo despues que mis padres salieron a trabajar hicieron lo mismo. Vinieron en una jeepeta, se hicieron los que andaban buscando a alguien y forzaron la puerta de hierro. Gracias a dios el candado fue tan fuerte que no pudieron abrir. Pero los vecinos nos dijeron que hasta bien vestido andaban.. para hacer el show más real. Increíble.

  2. y lo lindo del caso es que se atreben a dejar una factura de probos por no dejarlos terminar su «labor»

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