La era del Reloj calculadora

Los 80s significaron toda una revolución tecnológica para el mercado de los relojes, ya los modelos análogos y de cuerda habían perdido popularidad, y desde la anterior década una marca japonesa «Casio» comenzó a comerle los caramelitos a todos los que reinaban en el amplio y ancho mundo del tiempo. La juventud quería cosas nuevas, más tecnología y más dispositivos vanguardistas, que aparte de simplemente marcar la hora tuvieran otras funciones de igual o mayor importancia. De todos los relojes digitales que hicieron furor en la adolescencia de aquellos tiempos, ninguno fue tan exitoso y querido como el reloj calculadora, este cómodo aparato se acomodó en las muñecas de millones de personas que aprovechaban de él sus innumerables características como: Alarma, hora mundial, agenda y por supuesto calcular operaciones aritméticas.

El reloj más cool

Muy pronto, en las escuelas y colegios casi todos los varones tenían el suyo enganchado, aparte de que era toda una moda, se convirtió en casi una obligación para enfrentar los exámenes y las pruebas. Nos hacía sentir como si fuéramos el Inspector Gadget, o James Bond, este reloj modelo Calculator no solo se veía cool en nuestros brazos, también nos ayudaba en situaciones cotidianas. Totalmente digital, con su correa de plástico, este multifuncional dispositivo de medición del tiempo nos puso a prueba la lógica al incorporar varias aplicaciones que veíamos imposibles de lograr en tan pequeño aparato. Sin lugar a dudas este Casio sorprendió todas nuestras expectativas al poseer todo lo que queríamos ―y lo que no esperábamos ver― en un reloj. De aspecto deportivo, a prueba de agua, este aparato se convirtió rápidamente en nuestra prenda favorita, al punto de que no nos lo quitábamos para nada, incluso bañarse. El Calculator era símbolo de inteligencia, sabiduría y precisión todos los que llevaban uno puesto reflejaban todas cualidades.

Una minicomputadora de mano

Ese reloj, tan deseado en épocas de chivos y parciales, llamaba la atención de tan solo verlo, su diseño llamativo y futurista, una gran pantalla, junto a sus cuchumil botones ponía a todos los chicos locos en la clase, y las chicas, bueno digamos que quien poseía un Calculator podía impresionarlas fácilmente ―tener uno casi te ponía a ligar―. Quizás fue el dispositivo mas prohibido en los exámenes, debido a su practicidad y bajo perfil ante los profesores ignorantes de lo moderno. ¿Pero que era o que hacía de este reloj casi un objeto de culto? ¿Por qué hablamos de su época como una Era? ¿Qué era lo que tenía que lo hacía tan especial? El «Casio Calculator» fue quizás la primera mini computadora portátil del mundo, tenía todo lo que necesitábamos para aquella época poseía «telememo», una memoria para guardar mas de cien números telefónicos, Alarma múltiple, cronómetro, hora mundial, calendario, y claro con el podías hacer tus divisiones, restas y multiplicaciones con un solo dedo.

Se les fue el tiempo

Con el hacíamos de todo, guardábamos teléfonos de los amigos, calculábamos lo que sea que se nos viniera en la mente, echábamos vainas con el modelo «iluminator» el que traía una lucecita azul neón para esos momentos oscuros. ¡Teníamos todo! Con el Casio Calculator sentíamos como el futuro se ajustaba en nuestras muñecas, no podíamos pensar en otra tecnología que lo superara, simplemente era lo máximo. Ese reloj fue testigo de muchos momentos de nuestra niñez y adolescencia, también nos ayudó a salir de muchos apuros y momentos importantes. Lamentablemente se fue con la moda, para colmo los celulares remataron y lo mandaron al olvido. Hoy vivimos un momento en que hemos vuelto a utilizar los relojes análogos, con sus tradicionales agujas y pulsera de metal. Prácticamente todo lo que un Calculator nos proveía nos lo da hoy el teléfono móvil más básico y corriente. Hoy recordamos el gran impacto que nos dejó a todos al adelantarnos un poco la era actual de los aparatos multifuncionales. Todavía existen, incluso Casio ha lanzado nuevas versiones de este icono, aunque ya un poco tarde para las nuevas generaciones que no lo conocieron como nosotros, los que estuvimos justo a la hora indicada en el momento indicado para disfrutar del magnífico reloj calculadora.