Es lamentable que la queja en la República Dominicana el día de hoy sea que el secretario de medioambiente, Max Puig, y el senador Rubén de la Cruz, no se halaran las greñas ayer en el senado. Al parecer, si se hubieran entrado a puñetazos, si se hubiera ido la luz o sonaran algunos tiros, como ya antes ha sucedido, hubiera sido mejor.
Sigo pensando que Puig exageró con sus declaraciones y afectó gratuitamente el senador, pero si ellos lograron limar las asperezas, y aún mejor, acordaron trabajar juntos, no solo ganaron ellos, sino que ganó el país. Por otro lado, la atención mediática que generó su conflicto le viene muy bien al las áreas protegidas, pues los ojos del país estarán sobre el proceso, con esto, seguiremos ganando.
[…] Domínguez Brito y luego Max Puig. Este último se paró en junio pasado de forma estoica en una interpelación ante el Senado de la República a defender sus ideas ―protección de los recursos naturales― en un acalorado […]