Foto: Cachapa y torta de Alma Llanera. Por su presentación —fundida plástica a rallas—, la torta se parece más al chimi local.
Alma Llanera es un clásico, es el sitio que nos enseñó a comer cachapa venezolana. Deben de ser realmente pocos los dominicanos no han disfrutado del deleite que es comer una tortilla hecha a base de maíz, colocada a la plancha y rellena de queso y otros ingredientes elegidos según tu gusto. Todavía tienen una excelente comida. Probé la cachapa de molleja tratando algo distinto, pero estuvo desabrida. La segunda fue de peperoni y como siempre muy buena. Luego probé una torta, algo en el menú que nunca había probado. La torta está hecha de maíz al igual que la cachapa pero es mas salada, redonda y parecida a un biscuit relleno a tu gusto. La torta podría ser una extrapolación venezolana del chimi local ya que te lo entregan en una fundita como nuestro chimi. Me encantó el sabor de la torta porque que no es tan dulce como la cachapa y a mí no me gusta mucho el dulce.
Pobre presentación
El espacio físico de Alma Llanera está en decadencia, viejo y desgastado. Tienen una espantosa y simplista presentación para la comida: te la colocan en un plato de foam o te la envuelven en una de esas funditas transparentes de rayas. El precio es elevado para las porciones. Aun así muchas personas visitan el sitio con mucha frecuencia y disfrutan de los deleites que el maíz al estilo venezolano ofrece.