El Antónimo de Seguridad

El antónimo perfecto de seguridad es «Transporte Público Dominicano». Mientras la AMET detiene y multa un automóvil privado porque uno de los pasajeros no lleva abrochado el cinturón de seguridad, ignora al mismo tiempo los carros públicos que llevan dos personas sentadas en un sillón delantero, con la puerta medio abierta y, por supuesto, sin ningún tipo de protección. El antónimo de seguridad es un minibús sin puerta en el que tanto cobrador como pasajeros van con medio cuerpo adentro y medio afuera, pero estos casos no merecen ser multados. Me pregunto si las vidas que se movilizan vía transporte público valen menos, o qué.

No cojas presión

Lo que más me molesta es que nosotros los dominicanos aceptamos esto, creemos que es normal, que está bien. Nos apechurramos hasta más no poder en una guagua para que siga entrando gente y nos dejamos intimidar por un chofer que nos presiona sin tener en cuenta que el cliente -en este caso el pasajero- siempre tiene la razón, pues si los pasajeros decidimos bajarnos todos de la guagua se queda sin sustento diario ¿Cómo es que seis o veinte pasajeros nos dejamos presionar por un sólo chofer? Hago un llamado a todos los pasajeros para que no sigamos aceptando esto.

Abramos la boca

Empecemos a quejarnos para que las autoridades no sigan «echándose fresco», descansando en la ignorancia o sumisión del pueblo que les ha tocado gobernar. Los que no saben leer quizás no puedan hacer caso a este llamado, pero tú que eres uno de los afortunados que saben leer y hasta escribir, tienes la mayor responsabilidad. El transporte público dominicano debe empezar a cambiar y las garantías de seguridad deben empezar a existir. De lo contrario, sucesos como el del pasado 12 de febrero seguirán empañando nuestra cotidianidad y, por tanto, nuestra historia. Pasajeros, sin nosotros no hay transporte público, exijamos nuestros derechos.