Al parecer el cardenal López Rodríguez no se da cuenta de que gracias a este tipo de declaraciones es que crecen los grupos como el de José Luís de Jesús Miranda.
Yo soy partidario de que lo manden para su casa; aquí que venga la gente que pueda fomentar el bien, pero no un charlatán, sea quien sea, él es un charlatán. No lo queremos, que se largue lo antes posible, porque aquí no hacen falta ese tipo de gente, porque no va aportar nada en beneficio de la República Dominicana.
Tampoco se da cuenta el cardenal de que en sus mismas palabras hay una contradicción, pues si dice «sea quien sea, él es un charlatán» afirma estarlo juzgando sin conocerle. Pueden ver el artículo que escribí sobre esto en mi otro blog.